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La Oracion & La Buena Suerte

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Este tema esta reservado para el resumen del programa de hoy dia 3/30/2011 donde tocamos sobre el efecto de La Oracion en La Buena Suerte

imagen de pilares buena suerte

En el día de hoy como todos los miércoles vamos a tocar en un Tema Relacionado con la buena suerte; En el pasado aquí hemos definido La buena suerte pero vamos a definirla ora vez . La famosa buena suerte puede ser definida como los resultados favorables de una acción o circunstancia que efectuemos en nuestro diario vivir. Es importante que reflexionemos por un momento y aceptemos que podemos encontrar varios momentos de buena suerte en nuestro diario vivir y aveces estos momentos pasan por inadvertidos. Es importante que aprendamos a valorar estos momentos y a no permitir que pasen por inadvertidos, Deberíamos valorar y dar gracias a Dios por ellos.

Cuando estuve meditando en cual tema compartir con ustedes en el día de hoy se encendió una bombilla sobre mi cabeza, una bombilla que iluminaba toda mi mente, automáticamente pensé en compartir con ustedes el efecto de la oración con respeto a la buena suerte. Muchas veces esto es lo que da cabida a que nos lleguen resultados favorables.

Muchas veces estos resultados favorables llegan a consecuencia de nuestras propias oraciones, aveces llegan a consecuencia de las oraciones que nuestros padres, madres, y seres queridos hacen por nosotros y así sucesivamente.

La palabra de Dios en las sagradas escrituras, particularmente en el libro de Lucas (Lucas 11:9) nos dice que pidamos y se nos dará, porque todo el que pide recibe.

Citare algunos ejemplos bíblicos adicionales para que mediten y reflexionen sobre ellos:

Mateo 7: 7-11
“Pidan y se les dará; busquen y encontraran ; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre… Cuanto mas su padre que esta en el cielo dará cosas buenas a los que le pidan!”

Principio: El recibir algo de Dios comienza con el acto sencillo de pedir. Esto implica humildad y dependencia. Nos recuerda de que sin Dios no somos nada y que dependemos de su amor, de su misericordia, de su justicia y de su buena voluntad.

Santiago 4: 2
“No tienen porque no piden.”

Lucas 11:9
“Pidan y se les dará…Porque todo el que pide, recibe.”

Mateo 18:19
“Les Digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que esta en el cielo.”

Principio: Este verso implica que cuando oremos en grupo de mas de dos, tiene que ser oración de fe y en espíritu de acuerdo. Si existe desacuerdo en la comunidad de los creyentes, Dios no concederá sus peticiones.

Juan 14:12-14
“Ciertamente les aseguro que el que cree en mi las obras que yo hago también el las hará, y aun las hará mayores porque yo vuelvo al padre. Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo. Lo que pidan en mi nombre yo lo haré”.

Principio: El pedir tiene que ser acompañado de la autoridad de Jesus; esto implica que si uno depende de otra autoridad, la petición no será concedida.

Efectos de la Oracion:

Recordemos de que nuestra oraciones  y peticiones no harán de que el Padre y creador de todo el universo cambie su voluntad o acciones a favor nuestro. Simplemente hace efectivo lo que tenia decretado desde la eternidad a causa de nuestra oración. Dios en su voluntad puede productor el efecto por cual se oro.

El habito de la oración repercute en beneficio nuestro de varias formas. Ademas de obtener las gracias y dones que requerimos, este mismo proceso eleva nuestra mente y nuestros corazones hacia el conocimiento y amor de las cosas divinas, nos da mayor confianza en Dios y nos inculca otros sentimientos valiosos.

Tan numerosos y útiles son esos efectos de la oración que ellos mismos nos sirven de compensación aun en el caso de que no se nos conceda lo que pedimos.

La Atención en la oracion:

Es importante que reconozcamos que la atención durante la oración es parte esencial de ella misma.  La atención es una expresión del sentimiento que emana de nuestro intelecto. (La atención es 100% necesaria). Cuando cesa la atención cesa también la oración.

Cuando permites que que la mente divague o fácilmente se distraiga durante el momento de la oración puedes tener dado por hecho que esto también da fin a la oración. Esta solo re-inicia cuando la mente se retira del pensamiento que la distrajo.
Es un error permitir que las distracciones entre y nos interrumpan durante el momento de la oración ya que es una obligación dar todo de nuestra mente en este momento de dialogo, conversación y comunión con Dios Padre, Dios Hijo, y Dios Espíritu Santo.

Ejemplo: El Rosario es una cadena de oraciones compuesta mayormente de 10 Padre Nuestros y 50 Ave Marías. Este tipo de oración requiere de repetir las oraciones según las cuentas del rosario y si no ponemos total atención es fácil perder el enfoque y vaciamente repetir las oraciones mientras nuestra mente navega a otro lugar que nada tiene que ver con Dios. Este tipo de oración no tiene efecto ni valor si permitimos que las distracciones entren en nuestras mentes.

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