En el Espiritismo Cruzado, los amuletos ocupan un lugar especial como portadores de energías protectoras y benéficas. Estos objetos cargados de significado y simbolismo han sido utilizados a lo largo del tiempo para canalizar influencias positivas y resguardar a quienes los poseen. Explore con nosotros algunos de los amuletos más destacados en esta rica tradición espiritual.
La Mano de Fátima o Hamsa:
Este amuleto, con forma de mano abierta, es venerado en diversas culturas y religiones. En el Espiritismo Cruzado, la Mano de Fátima actúa como un escudo protector contra las energías negativas y como símbolo de bendiciones y fortuna.
Collares Espirituales:
Distintos de los elekes tradicionales, los collares espirituales son símbolos consagrados espiritualmente en ceremonias especiales. Aunque no siguen la misma estructura ritual que los elekes, se utilizan como amuletos en el espiritismo, cargados de intenciones espirituales.
Crucifijo de Caravaca:
Este particular crucifijo, originario de Caravaca de la Cruz en España, es considerado un poderoso amuleto protector. Se caracteriza por sus dos brazos horizontales. Se le atribuye la capacidad de ahuyentar malas energías y favorecer la armonía espiritual. Igualmente para solicitar la protección divina y favorecer la conexión con entidades espirituales benevolentes
Piedra Imán:
La Piedra Imán es reconocida por su capacidad para atraer energías positivas y repeler lo negativo. En el Espiritismo Cruzado, se utiliza como amuleto para magnetizar las vibraciones beneficiosas del entorno.
Collar de Semillas y Cuentas:
La combinación de semillas y cuentas en un collar puede servir como un amuleto personalizado, cargado con la energía de la naturaleza y las intenciones espirituales. Cada elemento elegido puede representar aspectos específicos de la protección y guía espiritual.
Collar de Ojo de Venado:
Este collar, con cuentas que imitan los ojos de un venado, es apreciado por su capacidad para disipar las malas energías y brindar claridad espiritual. Se utiliza como amuleto de protección y sabiduría.
Crucifijo de Palo Santo:
Al fusionar la esencia sagrada del Palo Santo con un crucifijo, este amuleto se convierte en un símbolo de purificación y conexión espiritual. Se cree que ahuyenta energías negativas y aporta una atmósfera de serenidad.
Velas Consagradas:
Las velas desempeñan un papel crucial como amuletos en el espiritismo. Activadas mediante la consagración. Cada color y esencia específica se elige para propósitos distintos, desde la protección hasta la atracción de energías positivas.
Medalla de San Benito:
Esta medalla, con la imagen de San Benito, es un poderoso amuleto protector. Se utiliza para alejar energías negativas y proporcionar resguardo espiritual. En el Espiritismo Cruzado, se incorpora como una defensa adicional en rituales de limpieza y protección.
Hueso o Semilla de Aguacate:
El hueso de aguacate se considera un símbolo de fertilidad y abundancia en el Espiritismo Cruzado. Se utiliza como amuleto para atraer prosperidad y fortalecer la conexión con las deidades asociadas a la tierra.
Ojo Turco:
Conocido por proteger contra la envidia y el mal de ojo, el ojo turco es un amuleto que se utiliza para disipar las energías negativas.
Llave de San Benito:
Este amuleto, con la imagen de San Benito, es considerado protector contra maleficios y malas energías.
Alcanfor: Reconocido por sus propiedades purificadoras, el alcanfor se utiliza para limpiar y proteger el espacio espiritual, proporcionando una barrera contra las energías negativas.
Crucifijo Tradicional: Un símbolo universal de protección en el cristianismo, el crucifijo se utiliza para invocar la presencia divina y alejar cualquier energía negativa.
Salmos y Oraciones: Recitar salmos específicos o oraciones, como la de la Santa Camisa, fortalece el aura protectora y establece una conexión espiritual más profunda.
En el Espiritismo Cruzado, la elección de amuletos es una práctica personalizada, guiada por la conexión con entidades espirituales y la intuición individual. Cada amuleto, imbuido con significado y propósito, se convierte en un vínculo tangible entre lo terrenal y lo espiritual, ofreciendo protección y guía en el viaje espiritual.