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El Café en Espiritismo Cruzado, Santería y la 21 División

En las tradiciones espirituales como el Espiritismo Cruzado, la Santería y la 21 División, el café se erige como una herramienta poderosa, más que una simple bebida estimulante. Enraizado en el misticismo y la conexión con lo divino, el café adquiere un significado profundo que trasciende lo terrenal.

El Significado Místico del Café:

En estas prácticas, el café representa la vitalidad y la energía de la tierra. Su aroma robusto simboliza la conexión con la naturaleza y el despertar espiritual. Beber café se convierte en un acto sagrado, una puerta hacia dimensiones más elevadas.

El Café como Ofrenda:

Ofrendar café a los seres queridos fallecidos o a los ancestros es una tradición arraigada en estas creencias. La bebida se convierte en un puente entre los dos mundos, una manera de compartir no solo el sabor, sino también la esencia y la energía revitalizante.

imagen de cafe para altar de espiritismo cruzado

La Energía que Irradia el Café:

Se cree que el café en Espiritismo Cruzado y las tradiciones afro-caribeñas emite vibraciones positivas, limpiando el espacio y atrayendo energías benévolas. Al ofrendar café, se busca proporcionar a los espíritus una fuente de energía que les permita manifestarse y comunicarse con el mundo terrenal.

El Porqué del Café:

La elección del café como ofrenda radica en sus propiedades únicas. Se considera una sustancia que despierta la mente y el espíritu, permitiendo una conexión más clara con las entidades espirituales. Su naturaleza terrenal pero estimulante lo convierte en el medio perfecto para el contacto espiritual.

Ofrendando Café a los Seres y Ancestros:

Preparar una ofrenda de café implica más que simplemente verter la bebida en una taza. Es un acto ritual, una oportunidad para expresar respeto y gratitud. A menudo, se coloca café en altares junto con otros elementos significativos, creando un espacio sagrado para la comunión espiritual.

Así, el Café en Espiritismo Cruzado y las practicas ancestrales se transforma en un conductor de energía mística, una puerta que se abre hacia lo sagrado. Beberlo socialmente crea oportunidades de conexión humana, pero consumirlo en comunión espiritual con los seres y ofrendarlo en altares añade una dimensión mágica-religiosa a esta apreciada bebida. En cada taza, se teje un lazo sagrado entre lo físico y lo espiritual, marcando la importancia de la conexión espiritual en estos caminos donde lo divino y lo humano convergen.

Escucha mas sobre el cafe en el siguiente video:

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Taza sagrada: El Café en la 21 División, Ofrenda a lo Divino y Conexión Espiritual

En la 21 División, el café se erige como un vínculo sagrado entre lo terrenal y lo espiritual. Al ofrendarlo en altares, este elixir oscuro se convierte en un puente único hacia el reino de los guedes, estableciendo una conexión profunda con los difuntos.

El café, con su tonalidad oscura que evoca la tierra fértil, se transforma en un símbolo visual de la cyclicalidad de la existencia. Cada sorbo participa en el eterno ciclo de vida, muerte y renacimiento, recordándonos nuestra conexión intrínseca con la naturaleza y el más allá.

La dualidad del café, ya sea amargo o endulzado, refleja las complejidades de la vida y la muerte. El amargor representa la pérdida y el duelo, equilibrado por la dulzura que simboliza la esperanza y la conexión continua con aquellos que han partido.

En las conversaciones compartidas alrededor de la taza, se tejen historias que trascienden el tiempo y el espacio. Cada palabra pronunciada se convierte en un hilo que une nuestro mundo tangible con el reino de los espíritus. El café se convierte así en el medio a través del cual se establecen los lazos entre lo visible e invisible, lo material y lo espiritual.

Este acto de compartir café en la 21 División va más allá de un simple ritual; es una celebración de la vida, la memoria y la conexión humana. En cada sorbo, se despiertan las energías de lo divino y lo terrenal, creando un espacio donde la magia es real y la comunicación con los difuntos es posible.

El café, en la 21 División, se erige como una ofrenda apreciada por los espíritus, una esencia que conecta nuestro mundo con el reino de lo divino. San Elías, con su presencia fuerte y protectora, recibe el café como un tributo que fortalece los lazos entre lo terrenal y lo celestial.

Los guedeses, entidades misteriosas y llenas de vitalidad, encuentran en el café una fuente de energía que alimenta su conexión con nuestra realidad. Al ofrecer café a los guedeses, se establece un puente especial que permite una comunicación más clara y una interacción enriquecedora con estos seres espirituales.

Los ancestros, venerados y recordados en la 21 División, también reciben el café como un regalo especial. Esta bebida oscura se convierte en un medio para honrar la memoria de aquellos que vinieron antes que nosotros, creando un vínculo entre las generaciones y manteniendo viva la llama de su legado.

Así, el café en la 21 Division se erige como un catalizador de experiencias trascendentales, donde la línea entre lo tangible y lo místico se desvanece. En cada taza, hallamos la promesa de un encuentro con lo sagrado y la oportunidad de honrar a aquellos que han trascendido. Este acto no solo es un gesto simbólico, sino también una expresión tangible de respeto y gratitud hacia San Elías, los guedeses y nuestros ancestros. En ese sorbo, se teje un lazo sagrado que trasciende el tiempo y el espacio, marcando la importancia de la conexión espiritual en este rincón donde lo divino y lo humano convergen.

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21 Divisiones: Una taza de cafe

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